El Proyecto C2 había identificado una formación rocosa que parece una cabeza humana y que se trataría de una efigie colosal. Este año se da permiso al equipo para retirar los escombros que había bajo esta estructura, observándose indicios de actividad de culto, fragmentos de estelas que estarían en la zona superior y los restos de la destrucción de la enorme cabeza humana, que habría sido dañada por mano del hombre, no solamente por el paso de los años. Probablemente, el lugar de la Cachette Real no estaba tan escondido.